C.R. Colindres
Historia
Las actividades del Club de Remo Colindres se iniciaron en la temporada 1988, cuando comenzó a competir en las modalidades de batel y trainerilla. Fue su primer presidente Ignacio Cuevas.
Ya en la década de los 90, el Club de Remo Colindres inició una nueva etapa de la mano de una nueva junta directiva, encabezada por José Luis Fernández Ochoa. En ella, la participación en las modalidades de batel y trainerilla se completó con la salida al agua, por vez primera, en la modalidad de trainera.
Fue en 1996 cuando Colindres compitió por vez primera en las regatas de traineras, algo que no había sucedido nunca con anterioridad, ni en esta etapa, ni en anteriores periodos del remo en la villa, pese a tratarse de una población con una gran tradición pesquera.
En aquella temporada, con José Luis Fernández Ochoa como presidente, las labores de la dirección técnica recayeron en el tándem Carlos Aparicio-Lolo Gutiérrez. En su primera temporada con el barco grande, la trainera de Colindres compitió con decoro e incluso eludió los últimos puestos del escalafón regional.
La medida de su rendimiento lo ofrece el quinto puesto obtenido en el Campeonato de Cantabria de traineras, por detrás de las tripulaciones de Santoña, Camargo, Santander y Pedreña y por delante de Castro, Astillero y Pontejos. Superar a traineras históricas del remo cántabro, como Castro y Astillero, en su primer año de andadura, constituye una buena referencia de cuál fue el nivel deportivo exhibido por los remeros de Colindres en su primera año de participación en las regatas de traineras.
Sin embargo, la temporada de los mejores resultados no fue esa, sino la siguiente, ya que en 1997 Colindres alcanzó el tercer puesto en el Campeonato de Cantabria de trainera ûsólo fue superado por el combinado Santander/Santoña y por Pedreña- y participó por vez primera en el Campeonato de España de traineras. En su segundo año de competición, con Lolo Gutiérrez como preparador, Colindres comenzaba a escribir su propia historia en el gran libro del remo.
En Vigo, donde se disputó el Campeonato de España de traineras, la tripulación de Colindres ocupó el último puesto. Pero su gran éxito fue, precisamente, el hecho de haber logrado su clasificación para competir por vez primera en un Campeonato de España de traineras, adelantándsoem así a otros clubes con mayor antigüedad, como Pontejos o Carasa, que hasta entonces todavía no lo habían logrado.
El tercer puesto en el Regional y su clasificación para el Campeonato de España fueron muy celebrados en esta villa de pescadores situada en la cuenca del río Asón.
Con el barco grande, Colindres siguió compitiendo en los años 1998, 1999 y 2000, aunque este último no llegó a terminar la temporada. En 1998 Colindres fue séptimo en el Regional participaron nueve traineras- y en 1999 fue octavo, compitieron ocho-. En la edición del 2000 no llegó a competir, ya que la falta de remeros obligó a concluir la temporada antes de lo previsto.
Tras cinco años compitiendo en trainera, y en el resto de las modalidades, la actividad del remo en Colindres decayó hasta alcanzar la práctica desaparición. No obstante, en el año 2003 comenzó una nueva etapa. Ese año accedió a la presidencia Eugenio Sánchez Matienzo, quien, al frente de una nueva junta directiva, comenzó a trabajar para la apertura de una nueva etapa, con José Ignacio Nazábal como entrenador.
El proceso iniciado en el 2003 no tardó en dar sus frutos, ya que muy pronto, no sólo los bateles y las trainerillas, sino también las embarcaciones de banco móvil, comenzaron a surcar, de nuevo, la ría de Colindres.
La culminación de esta nueva etapa ha tenido lugar en la temporada 2006, con la participación de Colindres, nuevamente, en la competición de traineras. Con José Ignacio Nazbábal como entrenador y Jesús Maza como patrón, Colindres ha participado en las regatas de la Liga ARC 2, logrando la séptima plaza en la clasificación final y dos segundos puestos en otras tantas regatas, las celebradas en San Juan de Luz y Sestao. Pero sin duda el mayor éxito de Colindres ha sido volver a competir con el barco grande, por sexto año en la historia del remo en la villa.